La teoría de la información de Shannon y Weaver se centra en la cantidad de información que un mensaje puede contener en función de la capacidad del medio utilizado. En este marco, se identifican varios elementos clave en el proceso de comunicación, como la fuente, que origina el mensaje; el transmisor, que transforma el mensaje en señales; el canal, que transporta esas señales; y el receptor, que decodifica el mensaje.