La educación juega un papel fundamental en el desarrollo de la sociedad, incidiendo directamente en el progreso económico al elevar el nivel cultural y profesional de los individuos.
El desarrollo económico de un país depende en gran medida del nivel educativo y cultural del mismo. En efecto, la escuela, al elevar el nivel cultural de los individuos aumenta también sus capacidades y, sobre todo, les otorga una base para la cualificación profesional, imprescindible para la expansión industrial.
Disminuir las diferencias sociales
Frente a las posturas anteriores, la educación debe mirar a unos intereses del individuo pero también, al propio tiempo, a las conveniencias de la sociedad, ha de promocionar a las capas inferiores de la sociedad, según el principio de igualdad de oportunidades. La educación ha ser uno de los principales instrumentos que permitan la igualación de los diversos sectores sociales.
Realizar una selección social
La educación, a través de procedimientos selectivos, puede establecer diferencias entre unos individuos y otros y conferirles roles sociales diferentes.
Servir a los fines políticos
Según lo anterior, la educación se muestra un buen instrumento al servicio de los designios políticos, pudiendo preparar a los individuos para un cambio y, sobre todo, para consolidar la situación existente.
Ejercer un control social
Todo grupo humano establece unas normas sobre el comportamiento de sus miembros y los obliga a someterse a ellas.
Adaptar a los individuos al grupo
Si el cambio social fuese demasiado rápido o intenso, la sociedad viviría una situación de crisis, de inseguridad y desconcierto. La función tradicional que ha desempeñado la educación es la de facilitar la inserción del individuo en el mundo social, hacerle miembro del grupo social.
Promover el cambio social
Pero la sociedad necesita al mismo tiempo introducir nuevas variantes y perspectivas, capaces de renovar viejas estructuras y asegurar su supervivencia y progreso. La educación contribuye también a fomentar el espíritu crítico y la creatividad de los individuos, a promover y preparar el terreno para el cambio social.
Asegurar la continuidad social
Al igual que los seres vivos, la sociedad trata de reproducirse y de perpetuar su identidad a lo largo del tiempo. Esto lo consigue transmitiendo a las nuevas generaciones todo el patrimonio cultural acumuladopor las generaciones anteriores.