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por vanessa bustamante hace 4 años

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EVALUCACIÓN PARA CONTRIBUIR A LA AUTORREGULACIÓN DEL APRENDIZAJE. IBIS ÁLVAREZ VALDIVIA.

La autorregulación del aprendizaje se concibe como un proceso dinámico y continuo que integra motivación, comportamiento y contexto. Este proceso se divide en cuatro fases: la orientación en la tarea, la toma de decisiones, la ejecución de acciones y la evaluación.

EVALUCACIÓN PARA CONTRIBUIR A LA AUTORREGULACIÓN DEL APRENDIZAJE. IBIS ÁLVAREZ VALDIVIA.

EVALUCACIÓN PARA CONTRIBUIR A LA AUTORREGULACIÓN DEL APRENDIZAJE. IBIS ÁLVAREZ VALDIVIA.

La autorregulación del aprendizaje es comprendida como un proceso activo, cíclico, recurrente, que involucra la motivación, la conducta y el contexto, es realmente un reto para la investigación y, en la práctica, se dificulta abarcarla en su integridad (Patrick y Middleton, 2002).

Sugerencias para el desarrollo el diseño de propuestas metodológicas que estimulen y evalúen la autorregulación del aprendizaje:
Diseño de la evaluación como tareas auténticas: planteamiento de problemas, superación de dificultades en situaciones realistas y relevantes desde el punto de vista del contexto social de referencia del alumno.

Evaluar el proceso de autorregulación del aprendizaje: pueden referirse algunos indicadores de interés para evaluar la autorregulación en cada una de las fases por las que transcurre este proceso (orientación y toma de decisiones, ejecución y evaluación).

Se identifican cuatro fases en el proceso de autorregulación
Orientación en la tarea: establecer relaciones entre factores personales

Toma de decisiones: definir metas y acciones resolutivas más estratégicas.

Ejecución de las acciones: Implementar acciones y estrategias de respuesta a las de- mandas de la tarea.

Evaluación: autorreflexionar y autoevaluar el proceso y los resultados.

Las acciones educativas que permiten ajustar la ayuda educativa a los procesos de re- gulación pueden darse en tres niveles: proactivo, interactivo y retroactivo (Allal, 1991).
El docente puede ajustar la ayuda en la misma interacción que se produce como fruto de la actividad conjunta que construyen el profesor y los alumnos alrededor de un contenido en el aula (regulación interactiva).

El docente puede decidir ajustar algunos de los elementos del proceso de enseñanza y aprendizaje una vez acabada la sesión en el aula y después suponer la revisión de la planificación que se había previsto, o la inclusión de alguna actividad posterior.

El docente puede decidir volver sobre algunos contenidos trabajados a lo largo del proceso de enseñanza y aprendizaje una vez acabada la actividad de evaluación.