Categorías: Todo - historia - conocimiento - ciencia - sociedad

por Santiago Acuña hace 2 años

223

Capítulo 2: La Ciencia

La ciencia es una construcción humana que ha evolucionado a lo largo de nuestra historia, representando el cúmulo de experiencias y conocimientos acumulados. Desde una perspectiva filosófica, la ciencia se dedica a analizar y descubrir las causas de los fenómenos, separando lo causal de lo fenoménico.

Capítulo 2: La Ciencia

Capítulo 2: La Ciencia

En la actualidad existe un gran número de ciencias que representan la diversidad de objetos estudiados por el hombre y el grado de especialización que ha logrado el conocimiento científico.

La ciencia se clasifica por objeto, método y teoría.
Clasificación de acuerdo a la teoría

Ciencias prácticas o aplicadas

Este grupo se encuentran ciencias cuyos descubrimientos o conocimientos tienen aplicación inmediata. Es evidente que cuando las ciencias y los conocimientos adquiridos son menos abstractos y menos generales se aproximan más a la aplicación inmediata y, en consecuencia, se manejan en menores grados de abstracción.

Ciencias puras o teóricas

Son aquellas cuyos conocimientos no tienen aplicación inmediata. El nuevo conocimiento se acumula pero no es aplicado. En términos generales, toda la ciencia avanza primero teóricamente, pero la aplicación práctica tarda en llegar. De esta manera podemos decir que, en ciertos momentos, todas las ciencias son puras o teóricas.

Clasificación de acuerdo al método

La deducción

Lo representa el proceso inverso, es decir, procede de lo general a lo particular. En ella se parte de un principio de validez general que puede aplicarse a cada uno de los casos particulares

Ciencias deductivas

Entre estas ciencias agrupamos aquellas en las cuales predomina la deducción, es decir, procedimientos que parten de lo general para arribar a lo particular. Este enfoque es típico de las ciencias formales o abstractas

La inducción

Es un método lógico que procede de lo particular a lo general; es decir, de la realización y observación de casos particulares descubre relaciones de validez general

Ciencias inductivas

Predominan procesos lógicos que parten del análisis de los casos particulares para llegar a lo general, lo que no significa que no utilicen la deducción sino que predominantemente usan la inducción

Clasificación de acuerdo al objeto

En este grupo encontramos ciencias cuyo objeto de estudio es la realidad abstracta o inmaterial, como los conceptos, axiomas, principios y demás creaciones intelectuales, que no son caprichosas ni subjetivas, sino producto de procesos racionales del hombre

Ciencias fácticas

Los objetos estudiados o los problemas planteados son hechos, sucesos, acontecimientos, fenómenos o realidades que se manifiestan fácticamente o que pertenecen a la realidad factual.

Ciencias formales

Estudian objetos, manifestaciones o fenómenos de la realidad histórico-social, es decir, en cuya realización interviene el hombre. Comprenden la investigación de hechos producidos por el hombre, que afectan la relación humana, o que explican su desarrollo histórico. A este grupo de ciencias pertenecen, entre otras, historia, sociología, economía, política, antropología.

Ciencias naturales

Estudian objetos, sucesos, acontecimientos, fenómenos o manifestaciones de la realidad, en cuya realización no media intervención humana, sino que se presentan por la sola acción de las leyes de la naturaleza y en donde, en todo caso, el ser humano solo descubre las regularidades a las cuales obedecen dichas manifestaciones de la realidad.

La ciencia consta de elementos que le son necesarios para su existencia. Para llevarse a cabo la práctica científica se necesita al sujeto pensante capaz de realizar intelecciones científicas. Sin embargo, la actividad científica no puede realizarse sin la existencia de un objeto hacia el cual dirigir la inquietud indagatoria. De igual manera, es necesario contar con un contexto relacional, simple o complejo, que nos permita explicar en forma integral la realidad u objeto, papel que le corresponde a la teoría.

Teoría
Es la base del desarrollo de la ciencia, pues toda investigación se realiza, siempre, a la luz de una teoría. Además, la pretensión de la investigación científica es, en muchos casos, la construcción de teorías. La teoría, dicen los expertos, es la espina dorsal de la ciencia, pues interconecta leyes que dan explicaciones parciales o particulares de la realidad.

El verdadero proceso de investigación culmina con la elaboración de teorías, que permiten dar una explicación integral, pues es una unidad explicativa que supone la interconexión de los hechos entre sí para incorporarlos en leyes que explican en forma fragmentaria la realidad.

Para obtener una explicación de conjunto científica, es necesario hacer una síntesis, desarrollar un sistema que permita organizar hechos, datos, hipótesis, leyes, conceptos, principios, postulados, con rigurosidad lógica, precisión conceptual, actividades que son indispensables para comprender la forma en que estos elementos rigen, ordenan y organizan un objeto o área de la realidad.

Requisitos de la teoría

Filosóficos

En estos requisitos ha de cuidarse el equilibrio entre los niveles a los cuales se refiere, es decir, acorde con los principios, postulados compatibles y predominantes en los círculos científicos. Los requisitos filosóficos son:

1. Parsimonia de niveles. Significa que la teoría debe aludir solo a los niveles implicados directamente, esto es, no ir a niveles superiores si no es necesario, ni ir a niveles alejados sin tomar en cuenta los próximos o intermedios: Este requisito es violado por las teorías animistas de la materia y por las teorías mecanicistas del espíritu. 2. Solidez metacientífica. La teoría tiene que ser compatible con principios y postulados de legalidad y racionalidad, pues estos últimos, sobre todo, promueven la formulación de principios metacientíficos del mundo que son necesarios en el conocimiento científico de frontera. 3. Consistencia desde el punto de vista de la concepción del mundo. La teoría no puede ser revolucionaria sino acorde con lo predominante en los círculos científicos; de lo contrario, no tendrá aceptación.

Metodológicos

Estos requisitos se enfocan al diseño del proceso de investigación y principalmente a la contrastación, refutabilidad, así como al diseño de técnicas y medios para la contrastación, entre otros. Los requisitos metodológicos son:

1. Escrutabilidad. Mediante este requisito se controlan los presupuestos metodológicos, manteniendo en duda las pruebas, las técnicas y los medios de contrastación y supuestos modos de conocer no controlables por otros medios y que no nos pueden llevar a conclusiones válidas. 2. Refutabilidad. Sirve como medida para probar la certeza de sus postulados; por ello, es importante imaginar hechos o circunstancias que puedan refutar la teoría: a mayor abundancia de ellos, mayor solidez de esta. 3. Confirmabilidad. Para ser aceptada, la teoría requiere de una confirmación de considerable alcance. 4. Simplicidad metodológica. Este es un requisito indispensable para las teorías complejamente elaboradas y cuya contrastación empírica no puede lograrse de manera inmediata.

Epistemológicos

Se refieren a la consistencia de la teoría con los conocimientos existentes, pues aun en la ciencia revolucionaria no puede basarse solo en las observaciones propias, pues no contribuiría al conocimiento. Los requisitos epistemológicos son:

1. Consistencia externa. Busca que la teoría sea consistente con los conocimientos aceptados, pues de otra manera solo se apoyaría en sus propias afirmaciones y no podrá ser tomada como una contribución al conocimiento, sino extraña; en consecuencia, sin fundamento o no con el conocimiento existente. 2. Capacidad explicativa. Por medio de ella se intenta lograr la exactitud adecuada para que puedan quedar contenidos los hechos y las generalizaciones que los explican dentro de la competencia teórica establecida. 3. Capacidad predictiva. Significa que la teoría, además de explicar los hechos a que se refiere o los ya sucedidos, debe buscar la posibilidad de inferir nuevos hechos o predecir acontecimientos insospechados. 4. Profundidad. Implica que la teoría debe, por el hecho de ser científica, rebasar el nivel del conocimiento popular, e ir más allá hasta la profundidad necesaria para, dentro de los niveles de la realidad, buscar y encontrar las explicaciones medulares o esenciales de lo investigado. 5. Capacidad unificadora. La teoría, además de la explicación de los hechos o fenómenos sobre los cuales se ha construido o a los cuales se refiere, debe pretender la comprensión de otros aspectos relacionados con los estudiados y entender sus redes e interrelaciones. 6. Fecundidad. Quiere decir que la teoría, además de la función específica para la cual fue creada, debe servir de base, dar origen o guiar nuevas investigaciones vinculadas o afines con los hechos sobre los cuales se construyó. 7. Originalidad. Sus aportaciones deben ser verdaderamente novedosas respecto de los hechos que la originaron o sobre los cuales se construyó; es decir, puede comprender nuevas explicaciones, planteamientos, enfoques, nuevos puntos de vista, nuevas derivaciones de los hechos estudiados, etcétera.

Semánticos

Se refieren a la exactitud y precisión lingüística con que se deben elaborar las teorías, es decir, la precisión de significados. Son de cuatro tipos:

1. La exactitud lingüística. Precisa que las expresiones gramaticales sean las correctas, de tal manera que se eviten las expresiones confusas. La ambigüedad, la vaguedad y la oscuridad de los términos específicos deben ser mínimas para asegurar la interpretabilidad empírica y la aplicabilidad de la teoría. 2. La interpretabilidad empírica. Busca la congruencia entre los hechos y la validez de los enunciados que los explican y permite inferir ciertos enunciados a partir de los presupuestos de la teoría. 3. La representatividad. Trata de que la teoría sea una reconstrucción de los hechos, sucesos o procesos reales para lograr la comprensión significativa de ellos. 4. La simplicidad semántica. Permite organizar la realidad de acuerdo con una tendencia, con la finalidad de entender los aspectos tanto fácticos como formales de los enunciados teóricos, sin complicaciones de lo escrito.

Sintácticos

Se refieren a la construcción de proposiciones coherentes.

1. La corrección sintáctica. Las proposiciones de la teoría deben estar lógicamente bien formuladas, con coherencia, es decir, no deben contener contradicciones internas. 2. La sistematicidad o unidad conceptual. Debe ser un sistema conceptual y, como tal, debidamente entrelazado. De esta manera, la contrastación de alguna de sus partes debe ser relevante para el resto de la teoría. Así, puede omitirse la contrastación o falsación de la teoría como un todo.

Funciones para la teoría

Identificar nuevos nexos del fenómeno investigado con otros fenómenos o con otras explicaciones más amplia

Recordemos que el papel de la teoría es integrar hechos o explicaciones aisladas a contextos explicativos más amplios e interconectados; de allí que su tarea sea identificar nuevos nexos entre los hechos investigados.

Proponer explicaciones científicas

Cuando se elabora o se propone una teoría se aporta a la ciencia una explicación nueva o modificada de los hechos o fenómenos a que se refiere; precisamente, una teoría tiene como tarea fundamental construir una explicación científica de los hechos o realidades a las cuales se refiere.

Buscar, identificar y formular nuevos problemas

Se debe recordar que la ciencia avanza gracias a la teoría y es precisamente esta la que favorece la identificación y formulación de nuevos problemas, los cuales se originan gracias a las nuevas explicaciones integrales propuestas por los desarrollos teóricos y que muchas veces contradicen o complementan lo establecido

Relacionar de manera lógica las construcciones efectuadas entre los distintos elementos teóricos

Permite comprobar la coherencia explicativa de los hechos y de la construcción conceptual de todas las operaciones realizadas.

Dividir los hechos

Facilita la comprensión y análisis de los hechos a través de su descomposición en elementos constitutivos más simples, y poder hacer su integración posterior.

Clasificar los fenómenos

Permite identificar similitudes y diferencias entre los distintos hechos o sucesos, de tal manera que se destaquen sus notas o atributos comunes, para derivar, con posterioridad, explicaciones también comunes.

Identificar y caracterizar los hechos

Permite definir los hechos con precisión y hacer una caracterización de ellos para distinguirlos de otros hechos o fenómenos.

Elementos de la teoría

Elementos o aspectos históricos

Se integran por las notas correspondientes al origen, procedencia o gestación de los problemas o fenómenos que se pretenden explicar. Asimismo, se ocupan del desarrollo, evolución y transformación histórica de tales hechos o fenómenos y ayudan a entender la evolución de los hechos o fenómenos

Elementos o aspectos de contenido

Permiten o favorecen el desarrollo de explicaciones causales o determinantes de los fenómenos, hechos o aspectos de la realidad a los cuales se refieren. Estos elementos ayudan a la construcción de los elementos formales.

Elementos o aspectos formales

Se integran por construcciones lógicas, es decir, toda construcción conceptual. Estas construcciones inciden en la forma de organización lógica de todos los conocimientos que integran el sistema, es decir, los conceptos.

Método
Es el planteamiento o pauta general que debe seguirse en el transcurso específico del proceso concreto de la investigación.

El método se elabora teóricamente mediante la abstracción de la práctica científica y se convierte en un planteamiento general del proceso de investigación que se concreta y especifica en función del objeto analizado y en concordancia con la teoría que se emplea en dicho análisis

En el método confluyen y se subsumen procedimientos, procesos, técnicas e instrumentos, sin que método, proceso, procedimiento y técnica sean una misma cosa.

Objeto
El objeto es el qué investigar de la ciencia; este se encuentra integrado por la realidad, entendida, como lo hemos dicho, en cualquiera de sus significados existenciales.

La realidad comprende tanto objetos o fenómenos del mundo concreto como del mundo abstracto, es decir, objetos de la realidad factual y de la realidad formal, esto es, tanto reales o manifestados fácticamente, como abstractos.

La ciencia es tan amplia y diversa como diversos son los objetos de conocimiento. Existe tal multiplicidad de objetos de estudio y de tan diversa complejidad, que a cada objeto llega a corresponder una ciencia que se dedique a desentrañar su significado, conocer sus leyes, descubrir y construir la teoría que permita entenderlos y explicarlos.

En el desarrollo histórico de la actividad científica surgen ciencias cada vez más elaboradas que construyen sus conceptos, especifican su objeto de estudio, etc., hasta llegar al nacimiento de ciencias nuevas con autonomía plena.

La ciencia es resultado de nuestro devenir histórico, es decir, es un producto humano que representa el cúmulo de experiencias unidas en nuestra historia. Esto es, la historia del ser humano no es otra cosa que la historia de la ciencia o de nuestro conocimiento.

Otros conceptos de la ciencia
Para Ander Egg, la ciencia es “un conjunto de conocimientos racionales, ciertos o probables, obtenidos metódicamente, sistematizados y verificables que hacen referencia a objetos de la misma naturaleza”.

Alfredo Tecla y Alberto Garza señalan que la ciencia “es una estructura, un sistema de teorías, principios y leyes y categorías que observan tres niveles que son el técnico, el metodológico y el teórico”.

Explican Kedrov y Spirkin: “La esencia del conocimiento científico consiste en la auténtica generalización... La coronación de la labor científica es la predicción, que nos descubre los horizontes de los fenómenos o acontecimientos históricos futuros, es el signo revelador de que el pensamiento científico sujeta las fuerzas de la naturaleza y las fuerzas que mueven la vida social a la realización de las tareas que la humanidad se plantea.”

Concepto filosófico
La ciencia, entendida filosóficamente, pertenece al mundo abstracto, ya que es la encargada de discutir y descubrir las causas de las cosas, separando lo causal (lo que tiene una explicación coherente y válida de los fenómenos observados) de lo fenoménico y de la forma en que se nos manifiesta la realidad.

Filosóficamente corresponde a la ciencia encontrar la verdadera causa de las cosas, estudiar objetivamente la realidad, penetrando en su estructura, en el ser de los objetos, lo cual implica una tarea sistemática y metódica.

La ciencia nos presenta la pretensión de un análisis totalizador de la realidad. Por ello, podemos afirmar, sin temor a equivocarnos, que la filosofía, en sus inicios, es la única ciencia, lo es todo. En esa etapa primigenia la filosofía comprende el saber científico; mucho tendrá que avanzar el pensamiento humano para que el saber se especialice y surjan las ciencias particulares.

Concepto sociológico
La ciencia es una creación humana, un producto social. Gracias a ella el hombre puede sobrevivir, dominar y modificar su medio para facilitar y hacer más placentera su existencia.

La ciencia transforma la realidad para el beneficio de la sociedad. Más aún, hacer ciencia obedece a una necesidad social. Es la sociedad la que plantea problemas o necesidades que la ciencia debe satisfacer. Una vez resueltos o una vez que la ciencia ha encontrado respuesta a tales requerimientos, los vierte en beneficio de la sociedad, la cual a su vez, en su práctica cotidiana aprueba, comprueba, rechaza o amplía y cuestiona dichas aportaciones.

Podemos afirmar que la ciencia puede entenderse como un conjunto de saberes originados en la práctica social, validados y comprobados en la misma sociedad.

Concepto etimológico
La ciencia proviene del verbo latino scire que denota saber, es decir, que ciencia (scientia) es el saber por excelencia; saber que pretende explicar los sucesos, fenómenos o realidades.

Luis Villoro afirma que ciencia es “un cuerpo de saberes, antes que un conocimiento, le importa la objetividad... La objetividad de su justificación le permite ser una garantía de verdad para cualquier sujeto que tenga acceso a sus razones”.

Es preciso tomar en cuenta que no todos los saberes pertenecen a la ciencia, por lo que se termina haciendo una descripción de ella y se dice que la ciencia es un saber o conocimiento objetivo, verificable, riguroso, metódico, teórico, susceptible de aplicación práctica, etc.