Las arritmias ventriculares representan un grupo significativo de trastornos cardíacos que incluyen taquicardia ventricular y fibrilación ventricular. La taquicardia ventricular se puede clasificar en polimorfa y monomorfa, con diferencias notables en la morfología de los complejos ventriculares y el ritmo cardíaco, que puede oscilar entre 140 a 200 latidos por minuto.